El ambiente de cultivo se extiende del sur, en las colinas de la zona de Módena, hasta las llanuras aluviales del territorio central de Emilia-Romaña.
Por este motivo se pueden identificar áreas de terreno muy disimiles, como terrenos de estructura media con buena cantidad de arena y grava.
Un área particularmente favorable para la producción del Lambrusco Grasparossa se encuentra al pie de las colinas de la “tierra roja.”
A medida que se baja a la zona de la llanura se encuentran terrenos menos compactos, cerca de los ríos principales: Reno, Panaro y Secchia, intercalados con terrenos más arcillosos y de alta fertilidad a los cuales se han adaptado maravillosamente nuestros viñedos.
Una alta pluviosidad es el elemento que completa el cuadro de un ambiente ideal para la producción del vino Lambrusco y del vino Pignoletto fresco y efervescente.
